lunes, 3 de mayo de 2010

A-un inerte

el camino se abre ,se llena repentinamente de grietas profundas
y lo que parece ser la realidad, no es mas que los laberintos de sus pensamientos,
la más inofensiva palabra se convierte en oscuro miedo , paranoia
se pregunta si alguna vez las cosas fueron menos caóticas,

¿en su niñez tal vez la realidad fue más simple?, pero se responde que no.

Su infancia transcurrió en un limbo del cual recuerda algo espeso.
Al crecer se transformo en algo notoriamente desagradable con esos granos en la cara
y esa timidez por escudo y mordaza.

En las primeras luces de su sexualidad revivió la culpa, una incómoda ambigüedad entre saber e ignorar, entre amor y odio, entre placer y asco.

La realidad se presenta como un fragmento de una pesadilla que no encaja con nada, la realidad la asusta y sobrepasa.

Si pudiera detener el tiempo, cambiar sus acciones, eliminar el remordimiento,

Si , ella lo hizo y sintió placer, - fue un orgasmo sentir su cuerpo convulsionar poco a poco bajo mis manos – le dijo - y finalmente quedó inerte –

Ahora está ahí en ese oscuro hueco pagando por un instante apasionado y erótico, con los fantasmas recorriendo la celda ,a los que les cuenta día a día la misma puta historia.

El tiempo transcurre como en una hoja en blanco, y las noches parecen calcadas, una igual a la otra.


ISABEL JORDAN

No hay comentarios: